Washington D.C. – En un movimiento escalofriante, Donald Trump ha decidido borrar del mapa cualquier rastro de diversidad y memoria histórica en Estados Unidos. Con una orden ejecutiva secreta, titulada «Restaurando la Verdad y la Cordura en la Historia Estadounidense», el magnate le ha dado a su compinche, el vicepresidente J.D. Vance, carta blanca para eliminar del Smithsonian Institution todo contenido que no se ajuste a su visión ultraconservadora.
¡El fin de la diversidad en los museos!
La indignación no se ha hecho esperar. Académicos, activistas y comunidades afroamericanas, feministas y LGBT+ han alzado la voz contra este ataque frontal a la inclusión. El Smithsonian, un bastión de la historia de los grupos marginados, está en la mira de Trump, quien insiste en que sus exhibiciones «adoctrinan» a los visitantes con una narrativa «izquierdista y divisiva».
Los museos más golpeados por esta embestida incluyen el Museo Nacional de Historia y Cultura Afroamericana y el Museo de Historia de la Mujer. En una declaración abiertamente transfóbica, Trump sentenció: «Queremos que el Museo de Historia de la Mujer celebre a las verdaderas mujeres, no que reconozca a hombres como mujeres en ningún aspecto». ¡Un ataque directo a la comunidad trans!
El regreso de los símbolos del racismo y la esclavitud
Pero la pesadilla no termina ahí. Trump también ha ordenado la restauración de estatuas y monumentos confederados, aquellos mismos que fueron derribados por representar un pasado de esclavitud y segregación. «Nos quieren devolver a la era de la supremacía blanca», denunció un historiador del Smithsonian bajo anonimato, temeroso de represalias.
Trump quiere censurar el arte y controlar la cultura
Como si todo esto no fuera suficiente, el expresidente ha puesto sus garras sobre el prestigioso Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas. Su plan: depurar la programación y erradicar cualquier expresión artística que no encaje con su agenda de odio. Artistas y defensores de la cultura temen que esta sea solo la primera fase de una censura masiva en el país.
México y Latinoamérica en la mira de la «guerra cultural» de Trump
Las consecuencias de esta ofensiva traspasan fronteras. En México y Latinoamérica, grupos ultraconservadores se han inspirado en Trump para replicar su discurso anti-LGBT+, antifeminista y racista. Si esta «purga ideológica» triunfa en EE.UU., podría convertirse en un peligroso precedente para el resto del mundo.
Las próximas elecciones estadounidenses podrían definir si el mundo cae en una era oscura de censura y revisionismo histórico o si las voces progresistas logran detener esta embestida. Mientras tanto, en la comunidad LGBT+ y los sectores progresistas de México, la alarma está encendida. ¡El futuro de la diversidad está en juego!

